Seguridad de Alimentos

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Seguridad Alimentaria en Hostelería La seguridad alimentaria es esencial en la hostelería para proteger la salud de los clientes y la reputación del negocio. Existen tres tipos de contaminantes: biológicos, químicos y físicos, todos con potencial de causar brotes graves. El norovirus, altamente contagioso, se transmite por contacto directo, superficies contaminadas, alimentos mal manipulados o partículas en el aire. Es crucial aislar a personas con síntomas, no permitir su regreso sin autorización médica y mantener estrictos protocolos de higiene y desinfección. Otras enfermedades como Salmonella y Hepatitis A también suponen riesgos serios. Se deben seguir buenas prácticas: cocción adecuada, evitar contaminación cruzada, lavado correcto de manos, control de salud del personal y desinfección frecuente de superficies. El control de temperatura es clave: evitar la “zona de peligro” entre 5°C y 57°C, donde las bacterias se multiplican rápidamente. Cada miembro del equipo debe estar capacitado, cumplir los protocolos y estar comprometido con la prevención. Obtener la certificación CARE refuerza la credibilidad y garantiza el cumplimiento normativo. Conclusión: La seguridad alimentaria es responsabilidad de todos. Cada acción cuenta para proteger la salud del cliente y la integridad del negocio.